Acércate a uno de los clubes de squash y consulta como lo puedes hacer para comenzar a jugar. Hay clubes exclusivos para sus socios y otros abiertos en los cuales puedes contratar un plan, o arrendar una cancha y raqueta por hora.
En ellos también, podrás consultar por clases de un profesor para aprender de manera más rápida y segura, para sacarle mayor provecho a tu tiempo. Además la mayoría de los clubes cuentan con escuelas de squash para menores.
Colócate las zapatillas, entra a una cancha, golpea la pelota y comprenderás porqué el squash día a día gana tantos adeptos.